Add parallel Print Page Options

34 «Nabucodonosor, el rey de Babilonia,
    me devoró y me confundió,
    dejándome como un plato vacío.
Me tragó como lo hace una serpiente,
    se llenó el estómago con mis delicias,
    y luego me vomitó.
35 Que caiga sobre Babilonia
    la violencia que ha cometido conmigo y los míos.
Los habitantes de Sion dirán:
    “Que se derrame mi sangre sobre Babilonia”».

36 Por tanto, esto dice el SEÑOR:
«Voy a defender tu causa y te vengaré.
    Convertiré su mar en un desierto
    y secaré sus manantiales.

Read full chapter